#MICRO-:
#RELATO:
Siempre dominaste el arte del interrogatorio.
Me besaste y no me supo a Martini. Los labios, como a todo hijo de la gran… Bretaña, te sabían a té. Toda tu boca tenía ese sabor terroso, fuerte, húmedo. Sabía delicadamente amarga. Fue algo premonitorio: delicada y amarga como la despedida de los amantes al amanecer.
Tras un par de caricias, mi cerebro se hizo compota. Te lo di todo: nombres, datos, fechas y el lugar exacto del intercambio. Luego pasaste a la acción sin apenas despeinarte. Probablemente la mejor aunque más corta escena de persecución de la historia. No tardaste en cogerme (güey). Huellas de derrape y cristales rotos entre las sábanas.
Me dejaste mezclada, agitada. Y tu lengua en mi garganta fue un pañuelo sacudido al aire en una estación de tren. Me besaste para ahorrarte la palabra. Pero entendí que me estabas diciendo adiós.
Total, ya te lo había dicho todo. Incluso que te quería.
Minade Carbón
Tus textos son casi siempre maravillosamente lúdicos. Y eso me encanta 🙂
Muchas gracias, Paula! Es que me divierto escribiéndolos 😉
Lo releo y cada vez me parto la caja más. Porque yo, que soy muy cinéfila, imagino toda la escena. Te he puesto de Bond a Pierce Brosnan, que es el que da tu tipo. Ahora imagina tú la escena.
Tu cerebro haciéndose compota y cómo sin pestañear, pero mirándole fijamente, le sueltas todo lo que quiere saber por esa boquita.
Y tras la persecución -que me recuerda a la escena del beso de «Un hombre tranquilo», pero con cama de por medio-, esa agitación y ese beso que hace que su lengua se menee como lo describes.
¡Es bestial! Y la última frase, redonda.
Gracias por hacerme desternillarme de risa. ¡Y lo que queda!
Qué gusto tanto entusiasmo! 😀 Brosnan es el primer Bond al que vi en el cine. No es mala elección. 😉
La escena del beso de “El hombre tranquilo” me parece graciosísima. La verdad es que yo no me imaginaba la escena exactamente como tú (tampoco me imaginaba a mí protagonizándola), pero no está mal. Quizá lleguemos a un acuerdo y te deje dirigir alguna adaptación cinematográfica. Háblalo con mi representante.
Me haces parecer muy mayor, porque yo al primero que vi fue a Roger Moore! 😦
Hablaré con tu representante, cuando me digas quién es, y nos ponemos a ello. Con tu guión y mi visión, como mínimo saldrá una peli tan buena como Scary Movie 3, jajajajaaja. 🙂
Hoy en día poner nombres a los géneros es lo de menos, pero a mí este texto me parece un poema.
Tienes una prosa poética tremenda, mucho más profunda -si me lo permites- que tu obra en verso. Me gusta y me convence. Debes explotarla.
La metáfora del pañuelo es perfecta; no exagero, es perfecta. Y el final es desolador.
El humor aquí no es inocente, cumple la función de contraste, y el imaginario fílmico lo sitúa en nuestra época -al tiempo que ironiza sobre ella- cuyo exponente máximo es Brosnan.
Muy divertido y a la vez muy hondo, Marina.
Me ha gustado mucho.
Qué bueno.
Me uno a la síntesis de Jaime:
acongojante, Marina.
Es como si a cualquiera de las señoritas de los títulos de crédito le pidieran que diera un pequeño discurso.
Buenísimo.
Y por cierto, lo tuyo es de Nostradamus mínimo.
http://www.elpais.com/articulo/cultura/Muere/John/Barry/genio/bandas/sonoras/elpepuculcin/20110131elpepucul_3/Tes